Ventanas practicables
Las ventanas practicables cuentan con la capacidad de abrir totalmente el hueco. Estas giran sobre herrajes en uno de los laterales de las hojas, por lo general al interior del edificio. Estas ventanas se abren utilizando una maneta, en la cual se puede incorporar una cerradura para obtener mayor seguridad. Es frecuente que estén situadas en el plano interior de la estructura, por lo que permite una abertura total y pudiendo girar la hoja hasta los 180º. Incluso se puede elegir hacia donde abrir la hoja, hacia el lado derecho o al izquierdo.
Las ventanas practicables adquieren prestaciones de aislamiento térmico y acústico muy elevadas gracias a la capacidad de estanqueidad que ofrece su cierre hermético a presión y a los herrajes en todo el área de la hoja con una mayor cantidad de puntos de cerrado en el marco.
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Este tipo de cerramiento se encuentra disponible en aluminio frío y con la rotura de puente térmico. En dicha situación se puede escoger con la hoja tanto vista como oculta. La perfilería de hoja oculta hace posible que se oculte visualmente la hoja del marco, por lo que disminuye todo lo posible el impacto visual del aluminio y se mejoran sus prestaciones.
Gracias al doble cristal de la ventana y a la rotura del puente térmico, la ventana logra un gran aislamiento térmico, por lo que no hay fugas de temperatura respecto a una con cristal simple y sin rotura. Además, se reduce el ruido que se percibe desde el exterior, lo que es perfecto para un hogar que se encuentra entre calles concurridas y con tráfico.
Debido a su estanqueidad, tampoco se filtrará agua, viento o aire. Y su total abertura facilita el mantenimiento y la limpieza de tota la estructura de la ventana.
Las ventanas practicables ofrecen varias formas de apertura. Esta apertura puede ser de manera vertical, tanto hacia el interior como el exterior, también de forma horizontal y oscilobatiente.
